El mundo que habitamos se encuentra en permanente cambio y todos los actores que lo integran deben tener una mirada a futuro para estar preparados y adaptarse de la mejor manera. La Inteligencia Artificial (IA), “redes en los cuales algoritmos y máquinas intentan simular el comportamiento del cerebro humano, se suma a la robótica para la 4ta revolución industrial”.
 

Las nuevas tecnologías proponen nuevos modelos de producción a través de la robótica, la automatización industrial y la impresión 3D; el uso tradicional del petróleo comienza a verse reemplazado por autos eléctricos, que a su vez van camino a manejarse solos. El avance de la tecnología promete modificar hasta lo impensado.
 

Sin embargo, pese a que pareciera ser que este avance sólo afectaría al modelo productivo más bien industrial, a la producción en masa, al sistema de transporte o al de las telecomunicaciones, no es así, la Inteligencia Artificial llegó para quedarse y puede reemplazar al cerebro humano en diferentes funciones y con mayor velocidad.
 

Entre los principales riesgos del avance de la robótica y la IA aparece la pérdida del empleo (se estima que en los próximos cinco años se podrían reemplazar más de 7 millones de trabajos en las principales economías del mundo) y posibles conflictos bélicos (según Elon Musk -Tesla, SpaceX- podría originar la tercera guerra mundial).
 

El universo de la publicidad no es ajeno a este avance: ¿podrá la Inteligencia Artificial superar a la creatividad del ser humano? ¿cambiará por completo el mundo de la publicidad dentro de 10 años? ¿Servirán los publicistas sólo para la parte comercial de las agencias? Si bien todo está por verse, en un principio pareciera ser que la IA llegó para hacerle un aporte al mundo del marketing y la publicidad.

“Hoy en día los negocios están tomando sus decisiones con solo un cinco por ciento de la data. Los negocios tienen que ver con toma de decisiones. La inteligencia artificial viene a darle esa accesibilidad a data a los negocios, para poder tomar decisiones con más data, con data que un ser humano es incapaz de procesar”, declaró Yoel Gavlovski, especialista en el tema.
 

La Inteligencia Artificial no es algo nuevo, de hecho, en el año 1997 la computadora Deep Blue de IBM venció al campeón mundial de ajedrez Garry Kasparov en tan solo 19 jugadas. Los avances en estos 20 años se han incorporado al mundo del marketing al punto de que existen más de 10 milllones de asistentes digitales en diferentes empresas y recientemente la agencia McCannn Japan’s desarrolló el primer robot creativo del mundo capaz de elaborar un anuncio en formato televisivo.
 

La principal lectura positiva sobre el avance de la AI en publicidad tiene que ver con la lectura masiva de datos (Big Data) y la posibilidad de personalizar el mensaje dependiendo de los públicos. A esto se suma la “analítica predictiva”, en donde los mercadólogos incluso pueden identificar cuándo los consumidores pasan por momentos “importantes” de su vida, un target a la medida” explica Eduardo Venegas de Merca20.com.
 

De esta manera, la Inteligencia Artificial permitirá optimizar los tiempos de quienes trabajan en Marketing y Publicidad: en lugar de destinárselo al análisis de planillas Excel o a responder consultas e inquietudes, podrá ser destinado a la planificación, la creatividad y la estrategia publicitaria.
 

A modo de conclusión, el avance de la Inteligencia Artificial es inevitable, como fueron tantos avances tecnológicos en el pasado. El ser humano suele sentirse amenazado frente a cualquier tipo de cambio y según diferentes expertos existen riesgos reales, pero también aparece una gran oportunidad para poder adaptar una nueva herramienta de trabajo para el beneficio de los seres humanos.
 

El mundo del marketing y la publicidad tiene frente a sus ojos la posibilidad de optimizar el análisis de data, de contar con alternativas creativas y de mejorar la interacción con sus clientes y potenciales clientes. En definitiva, la IA tiende a ser beneficiosa, como bien expresó John Forero de Ogilvy Latina, “es un proceso de selección natural: están los que se capacitan y aprenden de estos nuevos medios y tecnologías emergentes, y están los que no lo hacen. Ellos están fuera, son los Blockbuster de la publicidad”.